La
Educación Superior es una poderosa herramienta que permite formar personas
íntegras con un excelente profesionalismo, una alta capacidad de análisis y
aplicación de valores en la sociedad; de manera que dichas personas puedan ser
líderes contribuyendo con el mejoramiento de los aspectos relacionados a la
sociedad actual.
Las
Universidades son los organismos responsables del desarrollo de la Educación
Superior, aunque la sociedad y el Estado también deben ser agentes
participantes en el proceso de desarrollo de una Educación Superior de Calidad.
Actualmente,
las universidades tienen como función formar profesionales capaces de hacer
avanzar el desarrollo económico, científico, social, cultural, estructural y
humano de la sociedad. Sin embargo, los
avances tecnológicos y científicos, así como las nuevas tendencias sociales están
representando un desafío para la Educación Superior, ya que se está viendo
motivada a avanzar al mismo ritmo de la vida actual para mantenerse a la
vanguardia de las exigencias de los hombres y mujeres emprendedores.
Este fenómeno
se está reflejando a nivel mundial, y Panamá no escapa de este, pues hemos sido
testigos de los avances educativos que se han dado en nuestro país, aunque hay
que reconocer que faltan muchas áreas y aspectos por cubrir y mejorar.
¿Está la
Educación Superior preparada para mantenerse a la vanguardia de los avances
mundiales? Considero que a pesar de que
es todo un reto, es la misma Educación Superior quién debe imponer las
tendencias vanguardistas, puesto que de ahí deben surgir los nuevos
profesionales que logren desarrollar avances en diversas áreas que puedan
fortalecer y mejorar nuestra calidad de vida.
TENDENCIAS MODERNAS DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR
La evolución de la Educación Superior ha
permitido avances significativos para la sociedad porque ésta se ha encaminado
a que la educación impartida sea de calidad, equidad y pertinencia. Además de que se ha dado una unión entre
organismos docentes a través de la tecnología, ya que las redes académicas han
permitido una comunicación y participación más eficiente entre docentes,
estudiantes e investigadores a nivel mundial.
La fácil interacción entre los involucrados en
docencia superior ha permitido que no haya fronteras para el conocimiento y que
la educación sea internacionalizada, para que los estudiantes puedan tener
acceso al conocimiento sin importar en qué lugar se encuentren.
La internacionalización de la educación
superior ha llevado a que se planteen propuestas como el establecimiento de un
"Carnet Universitario Iberoamericano", propuesto durante el Segundo
Encuentro de la Red Iberoamericana de Universidades (UNIVERSIA) realizado en
Guadalajara, México en el año 2010. Este
carnet permitiría el uso de los servicios en todos los espacios universitarios
de Iberoamérica., además de que habría una mejor interacción entre las culturas
de los países permitiendo así aprender a valor y respetar la diversidad
cultural existente en el mundo.
Los nuevos modelos educativos y académicos
están enfocados en que los docentes sean facilitadores del aprendizaje y que
promuevan el pensamiento y análisis crítico a través de una interacción
creativa y dinámica entre los estudiantes.
Es decir que la pedagogía universitaria ha mejorado y no sólo se imparte
conocimiento, sino que hay que aprender a aprender porque el verdadero
aprendizaje se refleja en la comprensión y aplicación de la información
adquirida.
Las
universidades modernas cuentan con docentes que no sólo son catedráticos, sino
que a la vez son investigadores para que el conocimiento facilitado a sus
estudiantes se vea enriquecido por las propias experiencias adquiridas en la
disciplina que enseña. Esto permite que
el estudiante conozca y aprenda conceptos y hechos actualizados en base a la
situación actual.
Además, la
interdisciplinariedad que se está registrando en nuestras universidades permite
que los docentes, estudiantes e investigadores puedan enriquecer sus
conocimientos y experiencias gracias a la interacción e intercambio valioso que
se da al participar en otras disciplinas. La cooperación e involucramiento en
otras disciplinas permite el desarrollo de nuevos avances útiles para la
humanidad.
Otra tendencia
que está siendo utilizada por las universidades es la popular Educación a
Distancia que ha permitido que los profesionales con ansias de superarse puedan
estudiar y superarse, ya que el actual estilo de vida donde hay que atender
trabajo, familia y sociedad, no permite que muchos puedan optar por la
educación tradicional en un salón de clases; por lo que recurren a la educación
a distancia que les permite adaptar el aprendizaje a su ritmo de vida.
La educación a
distancia se ve fuertemente apoyada por la tecnología educativa que facilita al
estudiante poder acceder al conocimiento desde donde se encuentre, es decir que
ya no hay impedimento para aprender.
Las nuevas
tendencias universitarias están encaminadas a una optimización del sistema
educativo buscando que las universidades sean sistemáticas, dinámicas, abiertas
y multidisciplinares, y que al mismo tiempo los profesores sean investigadores
y demuestren estar capacitándose y actualizándose constantemente para que así
se mantengan a la vanguardia de las exigencias de la sociedad actual.
Evolución
del Sistema Educativo
La primera universidad en Panamá fue la Real y
Pontificia Universidad de San Javier creada en 1749 e impartía las disciplinas
de escolástica, filosofía y teología.
Luego en 1841 se crea la Universidad del Istmo donde se dictaba
gramática castellana y latina, retórica, teología, derechos públicos y
cánones. En 1904 se crea el Colegio
Universitario de Panamá, en 1912 se crea la Universidad Panamericana y en 1920
se crea la Ley Orgánica de Educación que presenta nuevos conceptos de estudios
y prevé la creación de una universidad con nuevos planes de estudio (Bernal,
2001).
En 1935 es
cuando se crea la Universidad de Panamá que durante los años posteriores pasa
por una serie de cambios e implementación de nuevas carreras. Para los años '60, la Universidad de Panamá
abre bajo una nueva fase jurídica y se dan la creación de extensiones
universitarias a nivel nacional, lo que propició un aumento en la matrícula de
estudiantes.
El Decreto Ley
16 del 11 de julio de 1963 reglamenta el establecimiento y funcionamiento de
universidades particulares en la República de Panamá. Además empiezan a crearse Centros de
Educación Superior pero no universitarios, sino que son centros especializados
y técnicos.
En los años 80
empiezan a aparecer las Universidades Privadas, y así es como la educación
superior va tomando más fortaleza.
Durante los
años 90, se amplía la oferta universitaria tanto a nivel estatal como privado, permitiendo
que los estudiantes tuvieran más opciones de estudio.
Entonces en el
2006 se dicta la Ley 30 del 20 de julio de 2006 que deroga la ley 16 de 1963,
creando el Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria que
norma el proceso de creación y funcionamiento de las universidades en Panamá.
Sistema
Nacional de Evaluación y Acreditación para el mejoramiento de la calidad de la
Educación Superior Universitaria
Según el
artículo 3 del Capítulo II de la Ley 30 de 2006 el Sistema Nacional de
Evaluación y Acreditación está conformado por el Ministerio de Educación, el
Consejo Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria de Panamá, la
Comisión Técnica de Fiscalización, las universidades oficiales y particulares
autorizadas por decreto ejecutivo, y como organismos de consulta, el Consejo de
Rectores de Panamá y el Consejo Nacional de Educación.
Está encargado
de promover el mejoramiento continuo de la calidad universitaria, desarrollar
una cultura de evaluación de la calidad universitaria, regular los
procedimientos y requisitos para la creación y funcionamiento de las
universidades y dar fe de la calidad de las instituciones y programas
universitarios.
Para cumplir
dichos objetivos, este Sistema ha desarrollado procesos complementarios para
las universidades: Autoevaluación de programas o carreras, Autoevaluación
institucional, Evaluación Externa por Pares Académicos y la Acreditación.
Consejo
Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria de Panamá (CONEAUPA)
El CONEAUPA es
el organismo evaluador y acreditador de la educación superior de Panamá. En el artículo 14 del Capítulo III de la Ley
30 del 2006 se establece que sus funciones son promover, organizar y
administrar el Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación, ofrecer asesoría
técnica a las instituciones universitarias en el proceso de autoevaluación de
programas y en la autoevaluación institucional, velar por el cumplimiento de
plan de mejoramiento institucional, coordinar la fase de evaluación externa de
los pares académicos, emitir públicamente la certificación de acreditación de
los programas e instituciones que cumplan con los estándares de calidad,
realizar programas de capacitación en evaluación, acreditación y gestión de la
calidad de la educación superior universitaria, entre otras.
En el año 2011
el CONEAUPA inicia con la primera fase del proceso con miras a la acreditación
institucional.
En el año
2012, se cumple con la segunda fase y las universidades privadas empiezan a
recibir su acreditación. Las dos primeras universidades privadas fueron la
Universidad Santa María la Antigua y la Universidad Latina de Panamá.
Según la Ley
30 del 2006, la acreditación de las universidades tiene una vigencia de seis
años, lo cual motiva a que estén en continua revisión y actualización para
asegurar la calidad y pertinencia de su enseñanza.
El CONEAUPA a
través de su Comisión Técnica de Fiscalización y en conjunto con la Universidad
de Panamá y las otras universidades oficiales realizarán la fiscalización del
funcionamiento de las universidades particulares.
ACREDITACIÓN
UNIVERSIDAD LATINA DE PANAMÁ
Llegado el año
2012, se da inicio finalmente a la segunda etapa del proceso de acreditación
"la visita de los pares", todo el equipo del CONEAUPA, así como los
miembros del consejo, las universidades, los estudiantes, académicos y medios
estaban a la expectativa, luego de pasados estos meses de intenso trabajo,
podemos ver los primeros frutos de esta experiencia enriquecedora en la que la
principal ganadora es la Educación Panameña.
La UNIVERSIDAD LATINA DE PANAMÁ, hizo entrega de su informe de autoevaluación el 28 de marzo
de 2012, recibió visita de pares externos del 15 al 20 de julio de 2012.
CARACTERÍSTICAS DE LA
EDUCACIÓN UNIVERSITARIA EN PANAMÁ
La Educación Universitaria en Panamá ha
sufrido una serie de cambios que considero serán positivos para el futuro del
país, ya que principalmente se está reforzando la calidad e innovación de la
educación superior, además de que se están actualizando las carreras según las
necesidades de la globalización.
Si ponemos en
una balanza, los pros y contras de la Educación Universitaria en Panamá,
considero que los pros hacen más peso
porque con el pasar de los años la educación y la tecnología educativa en el
país se han fortalecido y la tendencia es continuar en esa vía.
Es cierto aún
falta mucho por hacer para que la educación universitaria de calidad llegue a
toda la población panameña.
Dentro de los
aspectos débiles del sistema educativo me gustaría mencionar, la gran brecha
tecnológica entre educación y sociedad.
Aún existen estudiantes que no cuentan con acceso a internet fácilmente,
y otros tienen la herramienta pero no están capacitados para el buen uso de la misma
ya que no conocen la amplitud virtual de la educación.
Otro aspecto
educativo que se debe mejorar es cambiar el estilo de la educación
tradicional. El mundo actual nos está
exigiendo profesionales con capacidad de análisis y pensamiento crítico, pero
lastimosamente nuestro sistema educativo no motiva a pensar y a analizar, sino
a memorizar. A gran parte de la
población le cuesta dar ideas porque no se ha desarrollado su capacidad de
análisis, por lo que los métodos y técnicas de enseñanza deben redireccionarse
hacia la participación activa del estudiante a través del análisis, reflexión y
pensamiento.
Adicionalmente,
la educación universitaria tradicional hace mucho énfasis en hacer docencia y
no en desarrollar proyectos de investigación.
Algunos profesores no son investigadores, sólo catedráticos y se
mantienen desactualizados en muchas disciplinas. A su vez, esta misma cultura se transmite a
los estudiantes que son meros receptores y no emprenden investigación, ya que
lo ven muy complicado y tedioso, y no han sido estimulados hacia ese rumbo. Por otro lado,
los aspectos fuertes y positivos de la educación universitaria en Panamá
representan una excelente oportunidad de mejora y crecimiento para nuestro
país.
Definitivamente
que el hecho de que las universidades tengan que acreditarse para asegurar su
calidad, ha permitido que se esté desarrollando un nuevo camino en el
fortalecimiento de la docencia superior, puesto que la acreditación y calidad
exigen constante capacitación e impulso de la investigación.
Ahora, muchas
universidades privadas y centros de enseñanza superior acreditados están
presentando una amplitud de nuevas carreras también acreditadas que le permiten
al joven panameño prepararse y capacitarse en disciplinas acordes con la
realidad económica y social de
Panamá. Además de que los estudios de
posgrado a nivel de maestrías y doctorados fueron revisados y mejorados
cumpliendo con las normativas del CONEAUPA (artículo 38 de la Ley 30 del 2006).
Es beneficioso
para el país que las universidades cuenten con docentes capacitados y con
experiencia práctica en ciertas disciplinas que están impulsando la economía de
Panamá, pues esto permitirá que sus estudiantes aprendan conceptos y situaciones
reales y actuales, que sumado a la capacidad de análisis e investigación dará
como fruto profesionales idóneos, emprendedores y exitosos en las carreras que
seleccionaron.
La tecnología
educativa ha permitido crear plataformas para que las universidades, sobre todo
las universidades privadas de Panamá, puedan brindar a sus estudiantes carreras
y estudios de posgrado a través de una educación superior a distancia con
modalidades semipresenciales y virtuales.
El artículo 39 de la Ley 30 del 2006 menciona que el Ministerio de
Educación, el CONEAUPA y la Comisión Técnica de Fiscalización establecerán las
regulaciones necesarias que deberán seguir las universidades para esta
educación a distancia.
Las nuevas
tendencias de educación a distancia permiten que muchos profesionales panameños
puedan completar su formación personal e integral, ya que pueden cumplir al
mismo tiempo como profesionales, padres de familia, estudiantes y miembros
activos de la sociedad. Esto es de suma
importancia porque el estudiante adulto mantiene su entorno completo, mezclando
y cumpliendo con la sociedad.
Un aspecto muy
positivo que vale la pena mencionar, es que la Ley 30 del 2006 en sus artículos
43 y 45 establecen algunos incentivos como exoneración de impuestos fiscales
para las universidades particulares que cumplan sus funciones de utilidad
pública y social. Para los estudiantes
de alto rendimiento académico y bajos recursos, hay oportunidades de becas para
pregrado y posgrado.